Homeschooling

Se entiende por homeschooling como la práctica de educar a los niños en casa por parte de, generalmente, los padres (uno o los dos), aunque el proceso esté o pueda estar supervisado por un centro educativo o institución. Esta práctica no está regulada en todos los países de la misma forma y, en España, el homeschooling se encuentra en el limbo de la alegalidad.

Durante el confinamiento estricto de 2020 por la pandemia de COVID-19, los alumnos tuvieron que hacer de sus casas sus escuelas y muchos padres tuvieron que aprender a ser profesores en cierta medida, mientras que, algunos profesores, se peleaban con herramientas tecnológicas a las cuales no estaban acostumbrados (y a las que algunos se resistían a aprender). Esto no es exactamente homeschooling pero, aunque para muchos la situación supuso un gran problema, sorprendentemente, parece que también muchos estudiantes mejoraron sus resultados y redujeron sus niveles de estrés.

El debate parece repetirse en otras asignaturas. Una profesora del máster nos mostró una conferencia online de padres de hijos con algún tipo de problemas o discapacidad, que defendían la práctica de escuelas alternativas como el homeschooling frente a la escuela ordinaria, que había sido incapaz de ofrecer asistencia a alumnos y padres, generando así frustraciones y situaciones límite para muchos de esos estudiantes y sus familiares.

Sin embargo, a pesar de la defensa del homeschooling o la enseñanza alternativa, la mayoría de esas familias mencionaban la importante e INDISPENSABLE necesidad de socializar de todos los niños, función que se desempeña fundamentalmente en las escuelas. (¿Os habéis fijado qué lo he puesto en mayúsculas, negrita y con color chillón?). El derecho de un niño a poder socializar es eso, un derecho universal y fundamental, y las aulas parecen el lugar idóneo para ejercer este derecho: no solo se relacionan con otras personas o niños sino que adquieren competencias de trabajo en grupo, respeto, tolerancia, etc.

Además, de fondo hay una serie de cuestiones más que polémicas. Si los profesores son profesionales de la educación y los centros educativos el lugar donde estos profesionales ejercen sus múltiples funciones, ¿hablar de homeschooling no tiene el mismo sentido que hablar de tratar la salud de los hijos en casa en vez de llevarlos al hospital? Soy consciente que, hoy en día, hay muchas personas que dudarían de eso último también, what a time to be alive.

Me resulta curioso que, buscando un poco de información para esta entrada, en España, una de las más recientes (y también con mayor peso) peticiones de legalizar el homeschooling venga por parte de la plataforma Hazte Oír. Como dice mi compañero Luisfer en su blog, no hay que juzgar el contenido de una propuesta por quién lo dice, sino por lo que dice, así que no voy a entrar en la propuesta en sí. Sin embargo, que una plataforma tan altamente ideologizada y cargada de intereses y vínculos políticos ponga en cuestión el papel de los profesionales y las instituciones académicas y sus modelos de enseñanza para plantear modelos alternativos, me lleva a una serie de preguntas: ¿puede alguien querer educar a sus hijos en un modelo de homeschooling por motivos únicamente ideológicos, independientemente de que sea mejor o peor para ellos? ¿Preferiría alguien transmitir o dejar de transmitir según qué valores, conocimientos y competencias a costa de que su hijo no pueda desarrollar una serie de habilidades sociales? ¿Qué significa exactamente que los padres tendrían que tener la libertad de educar a los hijos como quisieran? ¿Es legítimo que un padre defienda su libertad de enseñar a su hijo que la tierra es plana? ¿O de pensar que su hijo no debería estudiar matemáticas porque las matemáticas son una creación del mismísimo Satanás? Y todos sabemos que puedo poner ejemplos que puedan escocer mucho más según quién pregunte, en todas y cada una de las ideologías del espectro político.

Vale, lo admito, igual mi opinión al respecto del homeschooling es negativa y estoy condicionado por ella, pero reconozco que el modelo tiene sus ventajas: circunstancias puntuales podrían encontrar en el homeschooling una alternativa viable que el modelo ordinario no puede ofrecer, y no se puede negar que el modelo es mas motivador y estimulante que el modelo ordinario. Existen países donde los contenidos y competencias que los estudiantes aprenden está bastante regulado y supervisado, lo cual es un alivio y que nos ahorra muchas de las cuestiones que he mencionado antes. Quizás un buen modelo de homeschooling podría ser solución para algún estudiante o familia con alguna circunstancia especial que hiciera que el modelo de homeschooling diera muchísimo mejor resultado, pero en cualquier caso debería ser la excepción y no la regla.

Espero que estéis acostumbrados a que yo no responda ninguna de mis preguntas, yo aquí no he venido a responder, sólo a preguntar:

¿Se te ocurren situaciones para la cual el homeschooling podría ser la única alternativa posible?